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amigocarne

Train Wreck

Train Wreck

Duermo siete horas y media exactas todos los días, me levanto rápidamente con las ideas alborotadas y desalineadas, busco por un poco de paz mental y café en la despensa, que está llena de escombros de telaraña. Me vuelvo a subir al tren, que parte sin falta a los quince minutos; se revuelca bastante, es algo complicado mantener las manos quietas mientras sostengo el diario del día que ya pasó, porque supongo que los que escriben el diario son adivinos, predicen cada evento y sobretodo catástrofe que me va a ocurrir a mí o al del al lado dormitando.


Vi aviones desplegando sus alas, que reparten pequeños fragmentos de información, nadie piensa que reunir los trozos nos lleve a algo.
Tras haber inhalado toda la tarde laboral, me deslizo callado a un bar, donde mis lunáticos amigos permanecen callados y semidormidos por el opio y las prostitutas morenas, me integro rápidamente con un par de aspiradas...

Me despierto de un golpe, perdí toda mi capacidad de memoria, rara vez recuerdo qué brazo estoy agitando al saludar. Gran parte de las cosas están nubladas por humos tóxicos del tubo de escape de algún auto.
Me levanto mareado en una habitación en la que jamás he estado ni imaginado, súbitas imágenes de un templo en la montaña, templos en los bosques, templos en el mar. Por fin mis ojos se acostumbraron a la oscuridad, siento algo extraño en mi rodilla... estoy sangrando y tengo frío; que extraña sensación. Veo hacia atrás, hay una pistola humeante junto al velo de una viuda que nunca ha sido usado, me siento bastante adormecido, no recuerdo haber tenido ningún tipo de sensación desde que... ¿desde cuándo?

Abro la primera puerta  a mi izquierda, es un baño, tengo una aguja en el cuello, no hay ninguna ventana pero se escuchan los alaridos brutales de guerra que hacen eco en algún lugar de donde estoy. Tomo el abrigo y junto a la persiana está ella fumando, nos colocamos juntos, me apoyo en sus manos, estoy centrado en un punto ciego, soy un muro, un vidrio antibalas, una cascada, los goteos celosos desaparecen, de mi cabeza se evapora el deseo, estoy siendo alumbrado por una linterna cegadora, me zambullo, recojo mi mochila y camino por el largo sendero dorado.

Puntos sobre puntos sobre puntos sobre puntos, nos comunicamos por sensaciones telepáticas.

 

1 comentario

gonchi -

weon este está la zorra
me gusto caleta se lee muy rapido y tiene esa sabiduria
de no tratar de controlar las cosas
de dejarlas qeu sean hasta que decanten
de dejarlas que corran por ti hasta que pasen completamente
por si mismas
"los goteos celosos desaparecen, de mi cabeza se evapora el deseo, estoy siendo alumbrado por una linterna cegadora, me zambullo, recojo mi mochila y camino por el largo sendero dorado"
esa wea es lo mejor
weon te felicito, la zorra la wea

al principio le falta una o y un punto pero filo, no empaña la wea
perfecto! un siete jajaja